Ante la explosiva expansión demográfica las ciudades deben dar respuesta ya no de una manera clásica con una planificación tradicional que seguramente no corresponderá a las demandas que los ciudadanos requieren.

Pero ¿Qué es una Smart City? La respuesta va por contar con una buena conectividad cuya calidad no esté en duda y la otra variable está dada por la seguridad que debe ser eficaz y eficiente. Como se explica esto, la movilidad urbana debe ser expedita y rápida, además de tener una sostenibilidad en el tiempo.

El gas y el agua debe ser dotada con buenas instalaciones que no colapsen ante progresivas y constantes lluvias. La gestioón para proveer un buen alumbrado público mediante tecnologías que permite discriminar en las estaciones del año encender a distintas horas, situación que se hace pos sistemas computacionales. No solo abarca aquello sino que en la recolección de basuras y su posterior tratamiento para evitar la contaminación de todo tipo.

Las urgencias y la seguridad pública, la educación, la salud primaria como respuesta deben ser de una alta planificación que equipos de profesionales puede desarrollar en concordancia con los objetivos perseguidos por estándares de una ciudad inteligentes. Todo ello pasa por gestiones municipales no improvisadas con participación de los vecinos que deben tener una alta participación, así se genera identidad y aporte de ideas que pueden mejorar el quehacer de los gobiernos locales.

Una ciudad que se gestiona al amparo de las tecnologías produce una cantidad de datos que le servirá para mejorar sus procesos el big data es importante. Un modelo de ciudad Inteligente se basa y desarrolla en un marco social, económico y tecnológico; además de la integración de los ciudadanos a las instituciones urbanas encontrando en ellas respuestas. La ciudad cuando se planifica de manera estratégica dará respuesta “sabias” a las múltiples necesidades de los ciudadanos y son ellos los que le darán el sello de ciudad inteligente por la capacidad de otorgar calidad de vida a éstos.

Fernando Hernández Jara
Máster en Economía Urbana
Ing. Constructor e Ing. Civil I